lunes, 28 de diciembre de 2020

LA GIMNASIA PERFECTA PARA TU CUERPO

             Figura de Pera.

  • Tu punto fuerte:  Los ejercicios que trabajan la parte inferior del cuerpo, como correr o montar en bicicleta, te resultarán más fáciles.
  • Tu punto débil:  El trabajo de la parte superior del cuerpo, especialmente de brazos, puede resultarte duro.
  • Qué debes hacer.
  1. Montar a caballo, es excelente para tonificar caderas, muslos y glúteos sin aumentar su volumen.
  2. Una actividad cardiovascular como la natación, especialmente en estilo libre, es excelente para brazos y hombros y equilibra la silueta.
  3. Gimnasia con pesas, desarrolla brazos, pecho y hombros.
  • Qué no debes hacer.
  1. Zancadas y sentadillas, si trabajas la parte inferior de tu cuerpo con máquinas de pesas en el gimnasio tus glúteos aumentarán menos de volumen.

            Figura de Manzana

  • Tu punto Fuerte:  La natación y el trabajo de la parte superior del cuerpo te resultarán  fáciles, al tener piernas y brazos delgados y una espalda fuerte.
  • Tu punto débil:  Los abdominales pueden ser una tortura para ti.
  • Qué debes hacer.
  1. Actividades cardiovasculares, la mejor es el entrenamiento en circuito, donde puedes quemar grasa durante un par de minutos y después hacer algo menos extenuante durante otros dos minutos.
  2. Tonificar el vientre con abdominales, sin olvidarte de la parte inferior de la espalda.
  3. Correr y caminar a paso ligero: son ejercicios excelentes para las piernas y para quemar grasas.
  • Qué no debes hacer.
  1. Practicar el estilo libre, pues dicha modalidad puede añadir volumen a tus hombros, que son bastante anchos.  En su lugar opta por la braza, que te ayudará a tonificarla cintura, los brazos y las piernas.

                Figura de Reloj de Arena.

  • Tu punto fuerte.  Los ejercicios de tonificación pueden ser para ti muy sencillos, dado que tu cuerpo está bien proporcionado por naturaleza.
  • Tu punto débil.  Los ejercicios de tipo cardiovascular pueden no resultare tan fáciles.
  • Qué debes hacer.
  1. Ejercicios cardiovasculares para mantener tus curvas a raya: procura dedicar al menos 30 min., cuatro días a la semana, a correr, montar en bicicleta, caminar a paso ligero o nadar.
  2. Practicar el yoga es estupendo para ti, pues tonifica todo el cuerpo sin centrarse en un área determinada.
  3. Subir escaleras o hacer aeróbic  con steps: son actividades cardiovasculares que queman grasas al mismo tiempo que hacen trabajar tus piernas, en especial los músculos de la parte posterior del muslo, que ayudan a definir la curva entre glúteos y muslos.
  • Qué no debes hacer.
  1. Demasiada gimnasia con pesas: te hará aumentar de volumen, especialmente si la realizas en lugar de los ejercicios cardiovasculares.

            Figura de Columna.

  • Tu punto fuerte.  El trabajo cardiovascular es el que te resulta más fácil.
  • Tu punto débil.  Trabajar con pesas te resulta más duro, pues tus músculos tienden a estar poco desarrollados.
  • Qué debes hacer.
  1. Montar en bicicleta, especialmente cuesta arriba: es un ejercicio excelente para tus caderas y tus muslos, ya que modela la mitad superior del trasero y define el área entre la cintura y los glúteos.
  2. Gimnasia con pesas: si estás haciendo zancadas, realiza elevaciones de hombro con pesas de 2 kilos en el mismo movimiento.  Tu objetivo ha de ser trabajar hombros y glúteos para definir la cintura.
  3. Ejercicios de pilates: son excelentes para tonificar los músculos sin hacer un esfuerzo aeróbico.
  • Qué no debes hacer.
  1. Un trabajo aeróbico o cardiovascular excesivo, pues no tienes demasiada grasa que quemar: no más de 20 minutos al día, tres veces por semana.

No caigas en el error de hacer siempre el mismo tipo de ejercicio.  Para tener un cuerpo proporcionado, debes realizar ejercicios diferentes.

lunes, 21 de diciembre de 2020

UN TIPO DE EJERCICIO PARA CADA FIGURA CORPORAL.

             Si conoces la forma básica de tu cuerpo, podrás adaptar tu programa de ejercicios físicos para obtener los mejores resultados.

            La mayoría de las mujeres no están satisfechas con alguna parte de su cuerpo, por ejemplo los glúteos, la cintura o el pecho.  Si éste es tu caso, la mala noticia es que no puedes cambiar la forma básica de tu cuerpo, pero la buena es que puedes mejorar su aspecto general realizando los ejercicios adecuados para cada caso.  En primer lugar, debes saber si tu cuerpo tiene forma de pera, de manzana, de reloj de arena o de columna  y después pasar a descubrir qué debes hacer para desarrollar un plan personal de ejercicios para modelar y equilibrar tu cuerpo, de manera que puedas llegar a sentirte satisfecha con tu físico.

            Un Objetivo Para Cada Tipo De Figura.

  • Figura de Pera:  Evita trabajar demasiado las áreas problemáticas, como caderas y muslos, para no correr el riesgo de incrementar su volumen, y en lugar de ello trabaja para desarrollar tus hombros.
  • Figura de Manzana:  Trabaja y tonifica tu espalda y tus extremidades ya de por sí fuertes, para contrarrestar la zona media de tu cuerpo, más pesada, y conseguir que se vea más proporcionada.
  • Figura de Reloj de Arena:  Céntrate en las caderas y en los muslos par tonificarlos y potenciar el atractivo de tu cintura.
  • Figura de Columna:  Trabaja los hombros y las caderas para crear algunas curvas y aportar a ambas zonas mayor definición.  Conseguirás así una cintura más marcada.
            

Para mejorar la figura corporal hay que minimizar las áreas problemáticas y conseguir un cuerpo de proporciones equilibradas.

lunes, 14 de diciembre de 2020

ALIMENTOS PARA LAS UÑAS

             Las uñas son el resultado de los nutrientes que se aportan al organismo.  Si nuestra dieta es equilibrada, crecerán más fuertes y largas.

            Hierro.  Garantiza el bueno funcionamiento de las células.  Su carencia puede dar lugar a unas uñas débiles y quebradizas.  Está presente, entre otros alimentos, en la carne roja, las verduras de hojas verdes y los cereales del desayuno.

            Cinc.  Es esencial para el crecimiento sano y regular de las uñas.  Se encuentra en la carne, los cereales integrales, el arroz, las judías, la leche, el queso y los huevos.

            Calcio.  Estimula el crecimiento de las uñas y las hace más resistentes.  Está presente en la leche, el queso, el yogur, las semillas de sésamo y las verduras de hoja verde.

            Ácidos Grasos Omega 3.  Hidratan las uñas, previniendo su rotura.  Se encuentran en el pescado azul, como la sardina, la caballa, el salmón y la trucha.

            Proteínas.  Proporcionan a las uñas su estructura y resistencia básicas.  El pescado, la carne, las aves, los huevos, los cereales y los frutos secos son excelentes fuentes de proteínas.

            Vitamina A.  Estimula el crecimiento de las uñas.  está presente en la leche, el queso, los huevos, las zanahorias, las verduras de hoja verde y las frutas de color naranja, como los albaricoques y los mangos.

            Biotina.  Hace que las uñas sean más fuertes, duras y gruesas.  La leche, los frutos secos, los huevos y los cereales son alimentos ricos en biotina.


Lo que debes también es importante para tener unas uñas fuertes.  Ocho vasos de agua al día pueden convertir unas uñas quebradizas en otras sanas y fuertes.


lunes, 7 de diciembre de 2020

TIPOS DE UÑAS

             Si quieres llevar las uñas largas, en primer lugar debes conseguir que crezcan más fuertes, y para ello es importante conocer sus características.

            Secas Y Escamosas.

            Este tipo de uñas tienden a descamarse y abrirse.  Dado que las uñas van deshidratándose con la edad y por la acción del agua fría, es una buena idea tener por costumbre cuidarlas de manera regular.

            Cuidados Rutinarios: A las uñas secas y escamosas les conviene una hidratación regular.  Invierte en algún aceite para las uñas y ten a mano un frasquito en el cuarto de baño, otro en la cocina y otro en el bolso.  Aplica unas gotas de aceite en las uñas y las cutículas con un suave masaje cada vez que te laves las manos: de este modo no aparecerán áreas secas y escamosas.  Un bálsamo labial puede ser una buena alternativa en caso de emergencia.


Utiliza un quita-esmalte que no contenga acetona, pues esta sustancia puede deshidratar aún más tus uñas.

            Grasas Y Blandas.

            Estas uñas son suaves y flexibles, de modo que es más difícil que se rompan, aunque tienden a deshacerse en capas.  Otro problema que plantean es que retienen mal la base y el esmalte, que resbalan sobre la uña en lugar de adherirse a ella.

            Cuidados Rutinarios:  En realidad, no requieren mucha hidratación: será suficiente un masaje semanal con una crema específica sobre la uña.  A diferencia de las secas y escamosas, toleran bien los quita-esmaltes que contienen acetona.  Además, este tipo de uñas crecen fuertes si se les aplican productos endurecedores, si bien su uso no deben prolongarse mucho tiempo, pues podría hacer que se volvieran frágiles.

Evita dejar las manos en remojo durante mucho tiempo, pues tus uñas se reblandecerían aún más.

            Finas Y Quebradizas.

            Estas uñas son las más débiles, y las más propensas a romperse y astillarse.  Cuanto más largas son más vulnerables se hacen, y resulta casi imposible que pueda crecer más allá del extremo del dedo.

            Cuidados Rutinarios:  Las uñas quebradizas requieren hidratación cuatro veces a la semana con un aceite específico, para aumentar su flexibilidad y resistencia.  Ten en cuenta que si te las arreglas de manera abusiva puedes debilitarlas.  Puedes utilizar como base protectora un líquido endurecedor de uñas.          

Busca productos que no contengan formaldehído ni tolueno, sustancias que hacen que las uñas se vuelvan aún más quebradizas.

            Normales.

            Las uñas de este tipo son fuertes y sanas, y crecen a un ritmo constante.  Sin embargo, requieren también cuidados regulares para mantenerse en buen estado; pueden abrirse o romperse si no se las cuida debidamente.

            Cuidados Rutinarios:  Un masaje sobre las cutículas con una crema para uñas, realizado al menos tres veces por semana, evita que las uñas se sequen.  Cada quince días, cambia la crema por un aceite específico para uñas y masajéalas durante unos cinco minutos.  No es necesario un endurecedor especial, pero para que el esmalte de uñas dure más, puedes aplicar dos capas de base en lugar de una.

El aceite de oliva es excelente para el cuidado de las uñas.  Prueba a darte un ligero masaje una vez a la semana.